¿Potencia hídrica?




La idea de que Colombia es inmensamente rica en agua no es tan cierta. La mitad del país goza de ese líquido en abundancia, pero a la otra mitad su escasez le está generando fuertes conflictos.

El agua genera conflicto porque, al igual que la riqueza en el mundo, alcanzaría para todos, pero no está bien repartida. Del total que hay en el planeta, el 97 por ciento es salada. De ese 3 por ciento restante, dos tercios están congelados en los glaciares y casi un tercio es subterránea. Eso quiere decir que menos del 1 por ciento de toda el agua está disponible en la superficie en forma de lagos, ríos y quebradas.


Ese escaso 1 por ciento tampoco está bien distribuido. Según un informe de la revista The Economist, “apenas nueve países concentran el 60 por ciento de los recursos de agua dulce del mundo y, entre estos, solo Brasil, Canadá, Colombia, Congo, Indonesia y Rusia los tienen en abundancia”. Con una cuarta parte del total, Suramérica es considerada una reserva mundial en agua. Según el Ideam, Colombia tiene una oferta hídrica seis veces superior a la mundial y tres veces mayor que la de América Latina. 



¿Por qué falta el agua entonces? Colombia reproduce lo que pasa en el mundo. En el centro y en la costa Caribe, donde habita el 80 por ciento de la población y se produce el 80 por ciento del PIB, apenas está el 21 por ciento de la oferta hídrica. Los tesoros de agua sí existen, pero en la inmensidad de la selva amazónica, en el Pacífico y en la Orinoquia.



Es decir el recurso hidrico en nuestro país no está bien distribuido y por eso en ciertas zonas del territorio existen poblaciones que no tienen o están mal abastecidas de tan importante liquido.